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agencia postal francesa en Santander

             La línea B de la Compañía General Transatlántica francesa que unía Saint Nazaire (Francia) con
             Veracruz (México), haciendo escala en La Habana, fue uno de los ejes de las comunicaciones de
             Europa con América Central.
             Una  circular  de  7  de  marzo  de  1871  anuncia  que  los  vapores  correos  franceses  tocarán  en
             Santander el día 15 de cada mes “y conducirán la correspondencia  para los puntos de América y Oceanía que
             se indican en la tarifa que es adjunta”. Debían llevar la indicación “VÍA DE SANTANDER”, aunque
             muchas  veces  se  sustituye  por  “VAPOR  FRANCÉS”.  En  la  parte  posterior  de  los  sobres  se
             estampaba el fechador circular de la línea.
             En 1875 se crea el fechador “PAQUEBOT” octogonal con la inscripción “SANTANDER PAQ.
             FR.  B. nº 1”, ampliado más tarde  a los nº2,  nº3 y  nº4.  Análogamente el puerto de Santander
             recibía la correspondencia de Cuba, México y América Central.






















             agencia postal inglesa

             Al establecerse en 1839  la Royal Mail Steam Packet
             Company, el General Post Office británico introduce
             el  uso  de  diversas  marcas  para  su  empleo  en  los
             puertos donde recogían correspondencia. En España
             se conocen de La Coruña, Vigo, Cádiz y Tenerife.




             agotado



             Terminado; extinguido.
             En  filatelia,  se  aplica  este  adjetivo  a  todo  producto
             postal filatélico que, independientemente de la canti-
             dad  en  que  haya  sido  fabricado  o  puesto  en  circu-
             lación, ha sido totalmente vendido.




             aguafuerte



             En filatelia, proceso químico mediante el que se pre-
             paran las planchas de cobre, zinc y también acero pa-
             ra la posterior impresión de sellos con ellas. Las plan-
             chas se cubren de barniz ennegrecido; con una aguja
             o un punzón se trazan o dibujan  las figuras con pro-
             fundidad suficiente como para dejar al descubierto el
             metal; sobre la superficie así preparada se vierte ácido
             nítrico y, cuando éste ha mordido lo suficiente el me-

             tal, se para el proceso y se retira el barniz mediante el
             correspondiente disolvente.

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